Desechos vegetales, material de arrastre como palos y residuos sólidos como envases y plásticos que obstruían el flujo normal de varias quebradas fueron retiradas por voluntarios de estas localidades con el apoyo de personal de las alcaldías, la Policía, el Ejército y los cuerpos de bomberos.
La presencia de este tipo de residuos en las fuentes hídricas representa un riesgo por la contaminación de los cuerpos de agua y su impacto sobre la fauna y la microfauna, además de la amenaza de represamiento de las corrientes que pone en peligro la integridad de las comunidades ribereñas, especialmente por la proximidad de la primera temporada de lluvias de 2019.
Corpochivor, la autoridad ambiental de la región, reportó que esta jornada de limpieza contó con la participación de seis mil personas, aproximadamente, residentes en los municipios de Garagoa, Sutatenza, Tibaná y Santa María. La recolección de los desechos tuvo lugar en las quebradas Los Manzanos, Los Perros, Caño Cangrejo y la Tenzusuca.
Fabio Antonio Guerrero Amaya, director general de Corpochivor, invitó a los habitantes del suroriente de Boyacá a continuar apoyando este tipo de iniciativas por el bienestar de los ecosistemas de la región y la tranquilidad de quienes residen en este territorio.