No tener una respuesta precisa o acertada cuando se le formula a los ciudadanos, fue una de las razones que llevó al Consejo de la Cuenca Media y Baja del Río Suárez y a la Gobernación de Boyacá a organizar lo que podría considerarse como la primera cumbre de quienes participan en la actualización de nueve planes de ordenación y manejo cuencas hidrográficas en el departamento.
Aunque el interrogante debería ser resuelto con suficiencia por quienes nos servimos de lo que la naturaleza nos ofrece, el desconocimiento de sus objetivos, propósitos y alcances es una de las causas que motivan las críticas que desde diversos sectores se les hacen a los procesos de ordenación que actualmente se adelantan en el país, particularmente por su desconexión entre los consejos de cuenca y las corporaciones autónomas regionales.
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Pomca (Plan de Ordenación y Manejo de Cuenca) es, según la definición ofrecida por el Ministerio de Ambiente, un instrumento a través del cual se realiza la planeación del adecuado uso del suelo, de las aguas, de la flora y la fauna, así como del manejo de una cuenca que a su vez implica la ejecución de obras y tratamientos dirigidos a mantener el equilibrio entre el aprovechamiento social y el aprovechamiento económico de los recursos naturales, la conservación de la estructura físico – biótica de la cuenca y del recurso hídrico.
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De izq. a der. Juan Carlos Salas, Carolina Barrera, funcionaria de la Gobernación; y Yesid Turmequé.
Yesid Turmequé, integrante del Consejo de la Cuenca Media y Baja del Río Suárez, explicó que en el encuentro de Paipa se realizará una evaluación de la participación ciudadana en la actualización de los Pomca al tiempo que se reflexionará sobre necesidad de que quienes participan en estos procesos tengan claro que un plan de ordenación de cuenca está estrechamente ligado con el desarrollo sostenible.
Turmequé sostuvo además que hay debilidades en el manejo de los conceptos y en la definición de los objetivos que deben guiar la actualización de los Pomca y que el evento de Paipa deberá dar luces sobre esa materia. Agregó que los ciudadanos deben ser actores determinantes en el diagnóstico de las cuencas por su vinculación con el territorio y que esa responsabilidad no se puede dejar solo en manos de las corporaciones o de sus consultores.
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Los Pomca y el medio ambiente
Juan Carlos Salas, presidente de la Fundación Ecohumana y Consejero de la Cuenca Media y Baja del Río Suárez, se refirió al propósito articulador del Pomca en procura de ordenar los territorios y de armonizar otros instrumentos de planificación como los planes y los esquemas de ordenamiento territorial, los planes de gestión del riesgo, de vertimientos y de residuos sólidos en torno al agua como una variable que es transversal a todos los municipios que comparten una cuenca hidrográfica.
Salas enfatizó que todas las actividades sociales y económicas de las comunidades dependen del agua, de ahí la importancia de que los ciudadanos hagan parte activa de escenarios de planificación como los Pomca.
“El agua no sale de la llave. El agua viene de una montaña, pasa por una quebrada, llega a un acueducto y allí es tratada, pero para que todo eso suceda tienen que existir una cantidad de instrumentos de gestión municipal que optimicen el recurso y que lo gestionen de manera adecuada”, explicó el representante de la Fundación Ecohumana, encargada de coordinar el encuentro de consejeros que tendrá lugar en Paipa el 6 de abril.
Piden ser tenidos en cuenta
Fabio Medrano, director de Medio Ambiente de la Gobernación de Boyacá, aseguró que los consejos de cuenca no han tenido una total incidencia en la actualización de los Pomca. Afirmó que una de las mayores dificultades tiene que ver con la normatividad vigente, el Decreto 1640 de 2012, que a pese a que propicia la participación ciudadana no garantiza que esta sea determinante en la definitiva ordenación de una cuenca.
Medrano anticipó que al final del encuentro de Paipa se hará un pronunciamiento departamental para que se modifique el Decreto 1640. En su opinión los consejos de cuenca deben dejar de ser solo entes consultivos para que sus recomendaciones sean tenidas en cuenta por las Corporaciones Autónomas Regionales y las empresas contratadas para la actualización de los Pomca.
“Es necesario que haya más garantías para la efectiva participación ciudadana. Queremos que el conocimiento tradicional de lo que pasa en las veredas y de cómo se relacionan las comunidades con el recurso hídrico sea tenido en cuenta para la toma de decisiones sobre el futuro de la cuenca”, concluyó el funcionario.
