Las deudas de Colombia en materia de reciclaje son altas. Un dato de la Superintendencia de Servicios Públicos, citado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), así lo evidencia: De las 11 millones de toneladas de residuos sólidos generadas anualmente en el país solo se recupera un millón, y el 10 por ciento de estas corresponden a materiales plásticos.
Y son varias las razones por las cuales las cifras de recuperación de materiales reutilizables son tan bajas: el escaso compromiso ciudadano por clasificar los desechos domiciliarios, la deficiencia de las empresas de servicios públicos y de las alcaldías para establecer rutas selectivas, promover estrategias y campañas constantes de educación ambiental, y general para cumplir con lo previsto en sus propios Planes de Gestión Integral de Residuos Sólidos de los municipios.
A estas razones se suma la debilidad organizativa de las asociaciones de recicladores y el ingreso al mercado de operadores empresariales que les compran a precios irrisorios el material, y luego lo presentan ante la Superintendencia como propio para acceder a los recursos provenientes de la tarifa pagada por los usuarios.
Formalizar a recicladores
De acuerdo con un reciente anuncio de la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad González, el gobierno del presidente Gustavo Petro Urrego promoverá la formalización de las asociaciones de recicladores a través de programas de economía popular y de crédito que faciliten el acceso a capacitación y a equipos.
Agregó que con el apoyo de cooperantes internacionales se avanzará en un plan de acompañamiento a los municipios destinado a promover la adecuada gestión de los desechos en aquellos que no cuenten con rellenos sanitarios propios, y la búsqueda de alternativas eficientes y económicas para la disposición final de sus inservibles.
La ministra Muhamad se refirió además al estudio de varias alternativas encaminadas a entregar incentivos a los ciudadanos cuando reciclen y ayuden a disminuir el volumen de residuos desde sus hogares.
En relación con las acciones de formación, la Ministra de Ambiente mencionó el apoyo que puede brindar el Laboratorio de Economía Circular del SENA, construido gracias al aporte del gobierno y la ciudadanía alemana, y en particular el servicio de capacitación encaminado a generar círculos de bienestar social, de justicia ambiental y de capacidades ciudadanas para el reciclaje
El acompañamiento de la cooperación alemana permitirá además avanzar en la iniciativa Proyecto Empleos Verdes de la Economía Circular (Prevec), “un trabajo articulado entre los sectores público, privado, la población recicladora y la cooperación internacional, con el fin de fortalecer la ruta hacia una economía circular que priorice la vida y el medio ambiente”.