Lo que sucede en el Lago de Tota es vergonzoso. Al uso excesivo de la gallinaza y de los fertilizantes químicos, de la sobreexplotación del suelo producto del monocultivo de cebolla y del vertimiento de aguas residuales por la falta de plantas de tratamiento se suma el tipo de desechos que llegan a su cauce.
Así lo pudieron evidenciar los integrantes de la Red de Jóvenes de Ambiente de Boyacá y de la Fundación por la Salvación del Lago de Tota que durante los días 24, 25 y 26 de noviembre promovieron una jornada de educación ambiental y de acopio de desechos en inmediaciones a este cuerpo de agua del que se abastecen al menos seis municipios de la provincia de Sugamuxi, entre ellos Iza, Firavitoba y Sogamoso.
Para el desarrollo de la actividad se conformaron tres grupos, cada uno responsable de la recolección en un ecosistema distinto: el terrestre, el acuático y el subacuático. El grupo encargado del terrestre recorrió la vereda Hato Laguna, el equipo que asumió la tarea en el ecosistema acuático lo hizo en el sector de la Isla San Pedro, y los buzos se ocuparon de la limpieza subacuática en la desembocadura del río El Tobal.
La limpieza terrestre permitió retirar 299,31 kilos de residuos ordinarios y 27,49 kilos de envases de agroquímicos. La recolección sobre el espejo de agua permitió extraer 46,54 kilos de desechos y la subacuática 98 kilos entre bolsas de basura, pañales y envases.
La buena noticia, como lo reportó Ricardo Sánchez Medina, instructor de buceo y representante de la empresa Dive and Tours, es que a diferencia de otros años en esta ocasión no encontraron envases de agroquímicos en la desembocadura del río El Tobal.
Esta revelación coincide con el reporte entregado por el alcalde de Aquitania, Luis Felipe Cardozo, en el sentido de que entre 2016 y 2017 se ha advertido una disminución en el volumen de desechos hallados, especialmente de recipientes de agroquímicos gracias a las campañas de educación y prevención dirigidas a los productores agropecuarios y en las que han intervenido la Corporación Campo Limpio, Corpoboyacá y la Gobernación de Boyacá.
Pero la basura sigue
Campañas como las mencionadas por el alcalde deben fortalecerse para erradicar definitivamente los desechos de los cuerpos de agua, y de eso es consciente el mandatario quien admite que falta mucho por hacer. “Aún hay personas del municipio que de manera inconsciente depositan sus basuras en los cuerpos de agua, también turistas que abandonan empaques y botellas y algunos agricultores que todavía hacen una mala disposición de los envases de agroquímicos”.
Luis Felipe Cardozo agregó que su administración amplió la recolección de desperdicios a los restaurantes que están fuera del casco urbano, aunque lamentó la imposibilidad para extender estas jornadas a zonas rurales poco pobladas por la distancia y la falta de capacidad logística para hacerlo.
También mencionó que el gobierno local no tiene los recursos para vigilar toda la ribera del Lago y que para hacerlo precisa de la colaboración de la Policía Ambiental y de Corpoboyacá.
Buzos comprometidos
Proyect Aware es una organización que reúne a buzos de diferentes partes del mundo comprometidos con la limpieza del océano y de escenarios naturales como el Lago de Tota. De ella hacen parte los 10 voluntarios que de la mano de Dive and Tours se sumergieron en el sector de El Tobal para extraer la basura depositada en el fondo.
Ricardo Sánchez, su gerente, sostuvo que desde hace 10 años concentraron la limpieza en el Lago de Tota tal y como lo han hecho en San Andrés y Providencia, Taganga, Santa Martha y Coveñas.
Se refirió al impacto de las basuras en estos cuerpos de agua y al hecho de que el 30 por ciento de estas flotan y el 70 por ciento se alojan en sus profundidades, sin embargo, advirtió que lo que sucede en Tota no es diferente a lo que ocurre en el resto de Colombia y en otras regiones del mundo.
A pesar del impacto en el ecosistema, el gerente de Dive and Tours se expresó optimista al considerar que el tema se puede solucionar si se emprenden acciones articuladas que vinculen a la comunidad, a la empresa privada y a las entidades del Estado a través de campañas educativas, acciones de regulación e implementación de la infraestructura para el tratamiento de aguas.
Disposición final
Campo Limpio, una corporación que se dedica a la recolección de envases vacíos de agroquímicos, realiza dos colectas mensuales en esta cuenca. La primera el último jueves de cada mes desde el casco urbano de Aquitania hacia Playa Blanca, y la segunda el último viernes de cada mes del casco urbano hacia el sector de El Crucero.
Aquitania es uno de los tres municipios de Boyacá que por su intensa actividad agropecuaria genera altos volúmenes de empaques de este tipo, de acuerdo con lo señalado por Nicolay Chaparro, coordinador de Campo Limpio para los departamentos de Boyacá y Santander.
Chaparro informó que los productores de cebolla de Aquitania están entregando 14 toneladas anuales de envases vacíos de agroquímicos para su tratamiento y disposición final, y que en el mismo nivel de generación se encuentran los municipios de Ventaquemada y Toca, importantes por su aporte a la economía regional a través de la papa que allí se cultiva.
¿Y la autoridad ambiental?
Corpoboyacá, autoridad ambiental en la cuenca del Lago de Tota, informó a través del subdirector (e) de ecosistemas y gestión ambiental, Jorge Parra, que la entidad, como integrante del Comité Seccional de Plaguicidas, participa del seguimiento a los planes de devolución de recipientes de agroquímicos en todos los municipios de su jurisdicción.
Insistió en que devolver este tipo de envases vacíos a los puntos de venta es obligación de los agricultores y desde los puntos de venta deben ser entregados a las casas comercializadoras para su manejo final.
Jorge Parra sostuvo además que semestralmente la entidad realiza campañas de recolección de llantas, medicamentos vencidos, pilas e insecticidas domésticos y que a ellas se invita a los municipios y a empresa especializadas en el manejo de residuos peligrosos como Campo Limpio, Bioentorno y Colecta. No todos los alcaldes se involucran a pesar de la importancia de la actividad.
Sobre las basuras domiciliarias halladas en el lago y sus riberas, el funcionario dijo que los alcaldes de los municipios de esta cuenca, especialmente Aquitania, Cuítiva y Tota, deben prever lo necesario para asegurar el adecuado manejo de los residuos producidos por los habitantes y los visitantes, sin embargo, fue enfático en señalar que en sus Planes de Gestión Integral de Residuos Sólidos (PGIRS) no hay programas dirigidos a las zonas de interés turístico.
El balance
“Aún queda mucho por hacer”. Esa fue la conclusión de Sofía Moreno, coordinadora departamental de la Red de Jóvenes de Ambiente, que se sumó al Día Nacional por el Lago de Tota que desde hace nueve años conmemora la Fundación para la Salvación de este embalse que dirige Javier Acevedo más conocido como ‘Silago Páramo’
La afirmación de Sofía resulta retadora para las autoridades de Aquitania y sus pobladores por la necesidad de asegurar una participación más activa de la comunidad local, pues la mayor parte de los voluntarios que intervinieron en la jornada de educación y limpieza provenían de ciudades como Sogamoso, Duitama, Tunja, Sotaquirá, San Luis de Gaceno y Bogotá.
Desde la Red de Jóvenes de Ambiente se invitó a las instituciones a ser más eficientes en el cumplimiento de las normas que regulan la protección de ecosistemas frágiles como el Lago de Tota y confió en que en el futuro jornadas como esta cuenten con más aliados públicos y privados, especialmente comunidad local, para que entre todos se logre la protección integral del agua como recurso fundamental para la subsistencia humana.
