Alfred Ballesteros, director de la CAR, durante su encuentro con la comunidad del área de influencia de la laguna de Fúquene. Foto: CAR.

CAR realizó inspección técnica en laguna de Fúquene

Alfred Ballesteros, director de la entidad, evaluó avances del plan de recuperación.

Fúquene es un ecosistema lacustre alimentado por los ríos Suta, Ubaté y Lenguazaque y es clave para la biodiversidad, la provisión de servicios ecosistémicos en el altiplano cundiboyacense, la regulación de crecientes y abastecimiento de agua a la cuenca del río Alto Suárez de la cual dependen municipios de Cundinamarca y Boyacá.  

El embalse natural ha sido objeto de drásticas intervenciones humanas promovidas por el Estado, especialmente a partir del final de la guerra de la independencia, hace un poco más de 200 años.

En esa época se avaló su desecación para permitir el desarrollo de actividades agrícolas y pecuarias, prácticas que redujeron su capacidad de almacenamiento en un 70%, según los datos de la CAR Cundinamarca, la autoridad ambiental responsable de su gestión. 

Sus limitadas posibilidades para acopiar agua se han visto reflejadas en el impacto sobre la biodiversidad, y las restricciones en el suministro hídrico al cual están expuestos los habitantes de la cuenca de los ríos Ubaté y Suárez.

La inspección encabezada por Ballesteros y su equipo técnico permitió hacer un recorrido por el complejo de humedales Fúquene, Cucunubá y Palacio. Allí se realizan labores de limpieza y mantenimiento para permitir el libre flujo del caudal por los canales y vallados de las fuentes hídricas que los alimentan.

Las acciones de reparación ambiental ejecutadas por la CAR están inscritas en el programa de Gestión Integral del Recurso Hídrico, la Biodiversidad y los Servicios Ecosistémicos, estas incluyen la restauración de 1.706 hectáreas de bosque andino, la recuperación de 3.800 hectáreas de espejo de agua, el retiro controlado de plantas acuáticas invasoras y la instalación de estaciones de monitoreo ambiental. 

Alfred Ballesteros aseguró que recuperar el complejo lagunar Fúquene, Cucunubá y Palacio es una prioridad y que con el apoyo de la comunidad se han definido las tareas a ejecutar en los próximos tres años “bajo un enfoque integral y con visión de largo plazo”.

El funcionario agregó que se avanza en un robusto programa de aprovechamiento de residuos orgánicos para la producción de abonos, y en el acompañamiento técnico y financiero a los municipios de la región para el mejoramiento de sus sistemas de saneamiento básico en procura de reducir su carga contaminante sobre el ecosistema. 

En referencia a la articulación con la comunidad, hizo alusión a proyectos de capacitación y educación ambiental, y a la promoción de una cultura ambiental con jornadas de formación en agricultura sostenible.

Gracias por leer nuestras historias, gracias por apoyar el periodismo independiente. Tu aporte será muy valioso para seguir investigando y contando historias de conservación.

Compartir:

Publicidad

Contenido Relacionado

Gracias por leer nuestras historias, gracias por apoyar el periodismo independiente. Tu aporte será muy valioso para seguir investigando y contando historias de conservación.

También le puede interesar