A sus 21 años esta joven de la vereda Los Alpes, en el municipio de Quípama, comprendió que su generación tiene una enorme responsabilidad en la adecuada gestión del territorio habitado por su familia y del cual han obtenido los recursos indispensables para vivir.
La minería es la principal fuente de ingresos para miles de personas que pueblan varias localidades del Occidente de Boyacá, principalmente Muzo y Quípama; la agricultura, la ganadería y el comercio se ubican en un segundo nivel de preferencia laboral, y la formación académica no es una prioridad para muchos jóvenes de la región. La ilusión, heredada de sus padres y abuelos, es hallar la fortuna en una esmeralda que les cambie la vida, por eso prefieren seguir siendo guaqueros.
Annie no lo pensó así y luego de culminar su bachillerato se inscribió en el SENA para realizar estudios técnicos en manejo ambiental. Su preparación le permitió en 2021 ingresar como practicante en Esmeraldas Mining Services (EMS), la empresa responsable de la operación de la mina Puerto Arturo, un emblemático yacimiento de esmeraldas situado entre Muzo y Quípama.
Su destacado desempeño le abrió las puertas para el ingreso formal a la nómina de la compañía y hoy forma parte del equipo responsable de liderar la gestión ambiental de la firma.
Particularmente Annie ha participado en la ejecución y monitoreo del programa de sostenibilidad de las operaciones mineras, este incluye acciones de prevención y mitigación ambiental como manejo de aguas residuales, gestión de desechos y recuperación de tierras, además de jornadas de educación ambiental y de trabajos de bienestar social con comunidades de la zona.
Annie destacó que el componente ambiental de la operación de EMS se ve reflejado además en las jornadas de reforestación y en la estrategia de reciclaje, una iniciativa que ha permitido reducir el impacto provocado por la generación de desechos y apoyar a una asociación de mujeres recicladoras de Quípama.
Por todas estas labores Annie, en representación de sus compañeras, fue postulada por EMS al ‘Premio Mujer Minera de Nuestra Tierra Boyacense’ convocado por la Secretaría de Minas y Energía de Boyacá, Women In Mining Colombia y la Mesa Sectorial de Minería “dirigido a guaqueras y mineras del departamento con el objetivo de reconocer y premiar a las mujeres destacadas en este sector productivo”.
Y precisamente el premio en la categoría ambiental fue para Annie Julieth Suárez. Durante la ceremonia de premiación, que tuvo lugar en el Auditorio Boyaquirá, de la Gobernación de Boyacá, en la ciudad de Tunja, Annie exhibió con orgullo el trofeo y lo dedicó a las mujeres mineras del Occidente de Boyacá.
Este galardón es un peldaño más en su aspiración por seguir aportando a la región y al bienestar de su comunidad. Su siguiente meta será graduarse como administradora ambiental de la Universidad Santo Tomás, institución en la cual cursa segundo semestre.
Annie será sin duda una garante de que la minería de esmeraldas logre alcanzar altos estándares de sostenibilidad ambiental a favor del suelo, los bosques y las fuentes de agua.
