Los problemas de contaminación que enfrenta el lago de Tota y su cuenca amenazan la seguridad hídrica de un poco más de 250 mil personas de la provincia de Sugamuxi.
El vertimiento de las aguas residuales del casco urbano Aquitania y de su zona hotelera; la proximidad de los cultivos de cebolla y los residuos de agroquímicos que por escorrentía impactan al lago, sumado a la invasión de sus riberas, a la captación ilegal de agua para cultivos y a los desechos provenientes de los criaderos de trucha, son varios esos conflictos sobrediagnosticados.
Desde la Asamblea de Boyacá, en cabeza del diputado Román Ortega, surgió una propuesta para costear las inversiones orientadas a procurar el equilibrio ambiental del embalse, situado estratégicamente en el complejo de páramo Tota – Bijagual – Mamapacha y ubicado geográficamente entre los municipios de Tota y Aquitania.
La idea, expuesta por Ortega, es proponerle al gobierno nacional la creación de un Fondo Económico dedicado exclusivamente a la captación de recursos oficiales, particulares y de cooperación internacional, similar al Fondo Colombia en Paz, con destino a la compra de predios de interés hídrico y a la financiación de proyectos de reconversión productiva, de restauración y de producción sostenible.
A través de nuestro podcast Diálogos entreojos.co conversamos con el diputado Ortega y le indagamos sobre las posibilidades reales de un Fondo de esta naturaleza y la manera como este podría blindarse de la corrupción y la politiquería regionales.