El arbolado urbano podría ayudar a reducir la temperatura en las ciudades hasta cuatro grados centígrados. Foto: Ambiente Bogotá.

Las ciudades deben adaptarse a la crisis climática

En España evalúan algunas posibilidades: reducir el tráfico de vehículos e implantar zonas verdes, incluso en terrazas de casas y edificios.

¿Cómo deben ser las ciudades adaptadas al cambio climático? Esa la pregunta que se formulan urbanistas, arquitectos, biólogos y otros planificadores de las ciudades del futuro.

Un urbanismo donde tengan mayor cabida los espacios verdes, una arquitectura que integre las variables para lograr edificios que ahorren energía, y espacios de participación ciudadana para ajustar las propuestas a las necesidades de los vecinos, esas son algunas de las alternativas planteadas.

“La manera de mitigar la temperatura provocada por la ‘isla de calor’, que se agrava con las olas cálidas en verano, es generar alfombras verdes tanto en las superficies (a pie de calle), como en altura (en las cubiertas edificadas) y buscar la permeabilidad del suelo”, expuso Salvador Rueda, director de la Agencia de Ecología Urbana de Barcelona.

Rueda considera que de esa manera se podría reducir la temperatura urbana hasta cuatro grados centígrados.

Según la NASA, en los meses de junio y julio “las olas de calor azotaron Europa, el norte de África, el Medio Oriente y Asia, mientras las temperaturas subieron por encima de los 40 grados Celsius (104 grados Fahrenheit) en algunos lugares y rompieron muchos récords de larga data”.

Los expertos que han planteado escenarios ideales para ciudades mejor adaptadas al cambio climático, consideran imperioso transformar el modelo de movilidad actual, con el objetivo de liberar espacio y sustituir los coches por arboledas que proporcionen sombra.

“A día de hoy, el espacio público es de uso casi exclusivo para la circulación de vehículos. Se recurre al asfalto, que es de color negro, y el nivel de absorción de calor es tremendo. La situación se hace insostenible en el tiempo” aseguró Rueda.

Este académico es el gestor de una iniciativa denominada ‘supermanzanas’, un concepto con el cual se define la propuesta de liberar del 70 por ciento del espacio público dedicado a la movilidad para priorizar senderos peatonales en los que se planten árboles. “Estos proporcionarán la sombra que necesitamos”.

Con información de conexioncop y NASA.

Consulte acá el artículo original: ¿Cómo deben ser las ciudades adaptadas a la crisis climática?

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