Reciclar es un acto de responsabilidad con la vida y el ambiente

En el Día Mundial de la recuperación y transformación de lo que ya no utilizamos, acá algunas definiciones importantes.

Con información adaptada del sitio inforeciclaje.com lo primero que habría que señalar es que reciclar es  obtener una nueva materia prima o producto mediante un proceso fisicoquímico o mecánico a partir de materiales en desuso o utilizados.

Así se logra alargar el ciclo de vida de un producto, ahorrando materiales y beneficiando al medio ambiente al generar menos desechos.

El reciclaje surge no sólo para obtener nuevos productos y disminuir la generación de la basura que llega a los rellenos sanitarios, también es esencial para enfrentar el agotamiento de los recursos naturales del planeta.

Pese a lo importante que resulta promover la racionalidad en el consumo como la responsabilidad en la generación de desprecios, el Colombia las cifras del reciclaje no son alentadoras. Según datos del mismo Ministerio de Ambiente, la tasa de reciclaje de papel, cartón, vidrio, metales y plásticos es apenas del 17 por ciento y según esa cartera a 2018 la meta es llegar al 20 por ciento, a partir de los instrumentos normativos en la reglamentación del servicio público de aseo y los marcos tarifarios.

El reciclaje paso a paso

El reciclaje comienza en entornos industriales y domésticos, mediante la separación de los materiales, lo que comúnmente los expertos denominan como separación en la fuente, una actividad que a pesar de su relevancia en el proceso de reutilización se desarrolla de manera voluntaria por ciudadanos y empresas, en otras palabras no es obligatoria a pesar de la existencia y vigencia de los Planes de Manejo Integral de Residuos Sólidos (PGIRS).

El siguiente paso consiste en la recuperación de estos materiales por las empresas públicas y privadas y su posterior traslado a las plantas de transferencia, donde las hay. En Boyacá solo el municipio de Garagoa dispone de una planta de este tipo. 

En estas plantas se almacenan y compactan grandes cantidades de residuos para su posterior transporte en grandes cantidades hacia las plantas de reciclaje, llamadas plantas clasificadoras.

Las tres R

Reducir es una de las prácticas fundamentales para bajar nos niveles de desechos que a diario se generan, y en ese sentido una de las recomendaciones de la Guía para la Minimización, Separación y Comercialización de Nuestros Residuos Sólidos, compilada por Corpoboyacá, en asocio con otras entidades, es poner en práctica la estrategias de las tres ‘R’: reduce, reutiliza, recicla.

La invitación a reducir está asociada a evitar la compra de artículos innecesarios y con exceso de empaques.

El reciclaje es el compromiso de separar los residuos recuperables para que puedan emplearse como materia prima.

La reutilización tiene que ver con volver a usar elementos que en principio pensemos en desechar pero que por sus características pueden ser útiles en otro tipo de actividades domésticas e industriales.

Qué separar

De acuerdo con lo expuesto en la Guía referida, tanto en los hogares como en las empresas puede haber tres tipos de residuos: no aprovechables, orgánicos y reciclables:

En la categoría de los No aprovechables están:

– Icopor

– Chicles

– Papeles higiénicos

– Minas de esfero

– Colillas de cigarrillo

– Residuos de barrido

En la clasificación de los residuos orgánicos:

– Verduras

– Tubérculos

– Huesos y pepas

– Cáscaras de huevo

– Cáscaras de frutas

– Restos de comida

– Pasto, flores y hojas

Y entre los reciclables:

– Papel

– Cartón

– Metales

– Textiles

– Plástico

– Tetra-pack

– Vidrios.

Gracias por leer nuestras historias, gracias por apoyar el periodismo independiente. Tu aporte será muy valioso para seguir investigando y contando historias de conservación.

Compartir:

Publicidad

Contenido Relacionado

Gracias por leer nuestras historias, gracias por apoyar el periodismo independiente. Tu aporte será muy valioso para seguir investigando y contando historias de conservación.

También le puede interesar