Cuadernos con hojas disponibles, textos, lápices, esferos, cartucheras y morrales usados, y en buen estado, hacen parte del listado de elementos sugeridos por Corpoboyacá y las alcaldías de Tunja, Duitama y Sogamoso para que los estudiantes y sus familias contribuyan con la reducción de residuos que llegan a los rellenos sanitarios.
Herman Amaya Téllez, director de Corpoboyacá, informó que se logró un acuerdo de voluntades con las secretarías de educación de Tunja, Duitama y Sogamoso, y con la Secretaría de Educación de Boyacá, para asegurar que los colegios públicos acojan esta iniciativa.
“La campaña Útiles REútiles tiene contemplado que desde las instituciones educativas se adopten hábitos conscientes con el medio ambiente, a través de acciones sencillas como la reutilización de útiles y elementos escolares, promoción del trasporte sostenible, alimentación saludable y disminución de uso de plásticos no degradables y de un solo uso”, se explicó desde la Corporación.
“No son útiles inútiles, por el contrario, son útiles REútiles. Boyacá, en promedio, tiene 254.709 estudiantes que consumen 3.565.926 cuadernos anualmente, que representan la tala de 29.716 árboles. Por esto, el impacto de la campaña ayudará a reducir la basura que diariamente produce cada persona”, complementó el director de Corpoboyacá.
Aunque las autoridades educativas pueden ejercer influencia directa entre los colegios oficiales para que acojan las recomendaciones de esta campaña, el secretario de Educación de Tunja, José Alberto Moreno Villamil, aseguró que desde la Oficina de Inspección y Vigilancia se hará un llamado a los colegios privados para que se sumen a esta alternativa. Moreno reconoció que no tiene competencia para conminarlos a que cumplan con lo que se ha propuesto.
Tanto José Moreno como Herman Amaya insistieron en que el reúso de útiles escolares permitirá disminuir la cantidad de desechos que llegan a los rellenos sanitarios, bajar el costo que implica el inicio del año escolar y sumar esfuerzos a las metas que tiene el país frente a la reducción de emisión de gases de efecto invernadero (GEI).
El director de Corpoboyacá agregó que se impulsará un proyecto para que los colegios se constituyan en islas verdes a través del programa de bosques urbanos. Su propuesta consiste en que estudiantes, padres de familia y profesores se comprometan con la siembra de árboles. De esta manera, sostuvo, “contribuiremos a mitigar la crisis climática. Los árboles ayudan en la captura de carbono y son importantes para regular la temperatura en las ciudades”.
Recomendaciones para la comunidad educativa
En el acuerdo de voluntades firmado entre Corpoboyacá y los secretarios de educación se plantearon las siguientes recomendaciones dirigidas a los rectores de instituciones de educación públicas de Boyacá, a los padres de familia, a los profesores y a los estudiantes:
1. En casa, clasificar aquellos útiles y elementos escolares (libros, cartucheras, colores, maletas, lápices, tijeras, uniformes) que, aunque ya han sido usados, pueden continuar su vida útil.
Algunos textos, por la vigencia de sus contenidos, son susceptibles de ser utilizados nuevamente. De esta manera los textos en buen estado, que no estén siendo usados, pueden cumplir su propósito formativo con estudiantes de recursos limitados, al ser donados a bibliotecas e instituciones educativas.
2. Realizar un collage en la primera página disponible –preferiblemente con datos o frases ambientales- a manera de separador, e iniciar su reúso en la página siguiente.
3. Asegurarse de que los lápices, colores, lapiceros, marcadores se hayan acabado del todo para identificar si se pueden usar una vez más y aprovechar la tinta que aún queda. Si el tamaño de los lápices y colores es superior a 9 centímetros, aún tienen vida útil.
4. Reciclar hojas: use los espacios en blanco para hacer ejercicios, tomar apuntes y mucho más. Si ya las usó por los dos lados y quiere desecharlas, asegúrese de hacerlo en el punto ecológico dispuesto para ello.
5. Preferir el uso de botilitos o botellas, contenedores individuales de alimentos, elaborados en plástico de alta durabilidad, metal, en vez de hacer uso de elementos de único uso.
6. Promocionar el transporte sostenible: es una mejora ambiental que puede promoverse desde los colegios. Incentivar la movilidad en transporte público, bicicleta o a pie; si no hay otra alternativa que usar el automóvil, compártalo con otras personas para reducir su impacto ambiental y ahorrar dinero.
7. Incluir meriendas o refrigerios saludables: los padres de familia y la Institución Educativa deben procurar incluir en la alimentación de los niños productos ecológicos, como frutas y jugos naturales elaborados con materias autóctonas y de temporada. Además de contribuir con el cuidado del medio ambiente, reduce la probabilidad de que los niños sufran enfermedades como el sobrepeso y la obesidad, originados por el consumo excesivo de alimentos procesados, con alto contenido de grasas y azúcares.
8. Disminuir el uso de envolturas desechables en los alimentos como servilletas, aluminio, celofán, icopor, etc, y favorecer el de materiales degradables o reutilizables. El exceso de empaques solo produce residuos que contaminan el ambiente.